La Navidad. ¿Un mundo rosa y azul?


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Desde hace semanas una avalancha de reclamos comerciales, las lucecitas de colores de los escaparates y los árboles de Navidad nos dicen que llega el momento de pensar en regalos, sobretodo para los más pequeños. Año tras año la misma pregunta de última hora: ¿qué juguetes le compramos a los niños? Y es que a menudo no es fácil escapar del azul y rosa, del juguete sexista y estereotipado de usar y tirar.

JUGUETES PARA MACHOTES Y PARA NENAS

En esta época del año por lo demás tan entrañable recordamos anécdotas y momentos que lastimosamente nos hemos encontrado viajando con nuestra hija. En Ecuador mientras preparábamos una masa para la pizza escuché a una mujer que le decía a un niño: "deja los juegos de cocina que son de niña". En algunos parques infantiles he escuchado a un padre decir a su hijo "vamos se valiente, mira como puede esa niña" o recuerdo cuando  en Bocas del Toro (Panamá) le compré una moto pequeña que Lluna escogió... en la tienda la confundieron por un niño, "como no lleva pendiente y lleva una moto". Una niña de unos 6 años, a la salida de la tienda le dijo a Lluna muy segura de sí misma "eso de es niños". Lluna se quedó perpleja y me miró yo rapidamente contesté a la niña que una moto es para niños y niñas, que es un simple juguete para quien quiera jugar.

Lluna sigue jugando con motos, coches y pelotas tanto como quiere y desearía que no tuviera que escuchar esos comentarios pero parece que siguen haciendo falta esas campañas, concursos, o exposiciones que en estas temporadas encontramos para sensibilizar a consumidores:

La Navidad. ¿Un mundo rosa y azul?

JUGUETES AZUL Y ROSA

Los escaparetes aparecen llenos de muchos colores, luces y regalos pero a estas alturas del SXXI todavía es difícil eludir la asignación casi automática  de los juguetes azul para el niño y el rosa para la niña. Recuerdo lo que me disgustó cuando era niña el regalo de un vestido de princesa que debería haber sido mi ilusión, pero también como me atraía la perfección de las muñecas Barbies.

La Navidad. ¿Un mundo rosa y azul?¿ Habéis visto las fotografias de Yunjeongmi? En el proyecto Rosa y Azul según afirma el propio autor "explora las tendencias en las preferencias culturales y las diferencias en los gustos de los niños (y sus padres) de diversas culturas, grupos étnicos, así como la socialización de género y la identidad. El trabajo también plantea otras cuestiones, tales como la relación entre el género y el consumismo , la urbanización, la globalización del consumismo y el nuevo capitalismo."

La Navidad. ¿Un mundo rosa y azul?Este artista descubrió que no solo su hija de 5 años preferia el color rosa. En Estados Unidos, Corea del Sur Unidos y otros países, la mayoría de las niñas se inclinan por el amor al rosa en la ropa, accesorios y juguetes. Este fenómeno está muy extendido entre los niños de diversos grupos étnicos, independientemente de sus antecedentes culturales. La influencia de los omnipresentes anuncios comerciales dirigidas a las niñas y sus padres, como la universalmente popular Barbie o Hello Kitty que se ha convertido en una tendencia moderna. Muchos juguetes y libros para las niñas son de color rosa, púrpura o rojo, y están relacionados con maquillaje, vestirse, cocinar, y los asuntos internos. Sin embargo, la mayoría de los juguetes y libros para niños se hacen de los diferentes tonos de azul y estan relacionados con los robots, la industria, la ciencia, las armas o los dinosaurios.

En realidad los colores rosa y azul en sí mismos son una anécdota. Lo que ya es menos inocente es el tipo de aprendizaje social que asociado y que afecta profundamente a la identificación de género y los roles que se supone son normales y esperables para los niños y las niñas.

LOS JUGUETES Y EL PLANETA TIERRA

La Navidad. ¿Un mundo rosa y azul?También durante nuestro viaje vamos apreciando los juguetes reciclados, reutilizados, reconvertidos, de usos múltiples a menudo y hechos a partir de simples de objetos de la naturaleza. Como explicamos en el post crecer viajando, hemos necesitado comprar pocos juguetes durante nuestra ruta.

Quizás al consumismo imperante no le interese que seamos creativos, que inventemos juegos y juguetes, que nos pongamos manos a la obra para fabricar uno. Y mientras para algunos niños en el mundo tanto y para otros tan poco; son abundantes las bienintencionadas iniciativas de recogida de juguetes para quien no tiene dinero  en aras de la búsqueda de la ficticia igualdad a través del consumo.

Tal vez la crisis nos pueda ayudar a reencontrarnos con lo que de verdad tiene valor. Por Nicaragua hemos visto coches hechos con madera y en el León Dormido (Ecuador) un patinete con ruedas y frenos. Con Lluna hicimos un memory reciclando un cartel y ¿quién no ha hecho una muñeca de trapo o un puzle o un juego de cartas o no ha jugado con enormes cajas para hacer una casa o un avión?

Y si hablamos del envoltorio, uff ! Cuanto residuo para tirar. Pero que opciones tenemos?. Aquí teneis una guía para unas navidades sin consumismo. Usar la imaginación puede ser uno perfectamente válido e inesperadamente divertido y bueno, también bastante económico.

Feliz Navidad !

La Navidad. ¿Un mundo rosa y azul?



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