Pero hay que ver que arrebato de besuconería le entra a algunos en cada campaña electoral. Debe ser parte del trabajo. Es como si quisieran convencernos que nadie que no sea capaz de querer a los niños pueda ser merecedor de ser gobernante: "Niños, os queremos" o el ya clásico "dejad que los niños se acerquen a mi", parecen querer decir.
Sí, estamos hablando de los políticos pero esto no es una arenga contra ellos, sería demasiado fácil y mucho menos una arenga contra Bush porque este sujeto era y seguro que continuará siendo suficiente arenga viviente contra sigo mismo. Esta es, que quede claro, una entrada a favor de los niños y su capacidad de expresar sin hipocresía todo lo que sienten. Ay!, con lo traquilito que estaba yo.
Es fácil hablar contra los políticos porque todos individualmente nos creemos inocentes sin embargo estaremos de acuerdo que mal que nos pese y en mayor o menor medida, los adultos de paises dotados de un llamado sistema democrático y con elecciones, tenemos colectivamente los políticos y los gobernantes que, snif, nos merecemos.
Sin embargo nuestros hijos no merecen la mediocridad y el cinismo general dominante de nuestra clase dirigente y no me parece nada mal que expresen democráticamente su malestar "¿Qué pretende este tipo? -deben pensar- otro al que no he visto en mi vida y me quire dar un beso sin preguntarme antes?".
Viendo estas desternillante serie de fotos que no os podéis perder se nota que los políticos buscan en campaña el voto adulto, deben pensar que a los niños ya tendrán tiempo de pedírselo algún dia, su fastidio les importa poco pues no les costará un voto, ya se sabe que los niños no entienden de la vida.
Bueno, yo no sé como lo van a hacer los políticos del mañana pero me parece que lo van a tener difícil para pedirles el voto unos niños que ya serán mayorcitos y a los que entre todos estamos dejando un planeta hecho un asquito y una sociedad donde estudiar, tener un trabajo digno y en definitiva ser sencillamente felices es cada vez más y más complicado por muchos aparatitos y adelantos técnicos que haya.
No me extraña que los niños les pongan esa cara a esos señores tan sonrientes Sólo faltaría que en pleno SXXI les sigan suprimiendo beca y acumulándolos en unas aulas cada vez más hacinadas y encima tuvieran que reirles la gracia.