Lactancia y viajes, dos aliados perfectos

    7 / 6 / 2023

    Última modificación: 

    24 / 7 / 2023

¿Es bueno combinar lactancia y viajes?

Tanto la OMS como la UNICEF recomiendan lactancia materna exclusiva durante los primeros 6 meses y junto con alimentación complementaria hasta los dos años o más. Las evidencias científicas son abrumadoras señalando la importancia que tiene la leche materna en el desarrollo del recién nacido.

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Además de mantener a nuestro/a bebé hidratado la leche materna proporciona nutrientes necesarios para su crecimiento y los agentes necesarios para prevenir infecciones y alergias presentes y futuras.

Sin embargo, a pesar de ser un acto natural, pueden presentarse problemas para amamantar durante las vacaciones o cuando no estás en casa, debido a los prejuicios que todavía existen sobre una mujer lactando en la vía pública.

Y es que la lactancia materna proporciona innumerables ventajas, también cuando viajas empezando porque no necesitas llevar biberones, esterilizadores ni ningún otro implemento para preparar el alimento del bebé.

La leche materna es un complemento perfecto para que su sistema inmunitario esté al máximo, preparándose así para nuevos retos bacterianos y víricos.

En caso de enfermedad activa, especialmente en caso de diarreas, que posiblemente sea la afección común de todo viajero, la leche materna puede ayudar a recuperar la hidratación oral, y repoblar la flora intestinal, aunque se tomen también rehidratadores orales de farmacia o cualquier medicación prescrita. La mayoría de las veces es lo único que aceptan comer cuando están enfermos.

Además, la leche materna siempre está disponible cuando la necesitas, en la cantidad y a la temperatura adecuada, y esta acción proporciona calma y sosiego al bebé. De esta manera, puedes disfrutar con mayor tranquilidad tu viaje.

¿Dónde y cómo dar el pecho si no estamos en casa?

Es fundamental encontrar las condiciones apropiadas para dar el pecho cuando no estás en casa. En primer lugar, busca un lugar tranquilo, donde puedas sentarte y estar con tu bebé. Encontrar la posición adecuada es muy importante, y por eso puedes ayudarte con un cojín de lactancia de Mimuselina por ejemplo. En esta tienda online, de hecho, es posible adquirir los mejores accesorios para bebés y recién nacidos, que ofrecen más comodidad a la madre y al bebé.

De todas formas, a pesar de que el acto de amamantar en la vía pública es legal y es incentivado por parte de organizaciones internacionales, socialmente existen muchas restricciones al respecto. Para evitar una sensación de incomodidad puedes elegir, cuando salgas, ropa para madres lactantes, para descubrir el pecho con discreción.

Consejos para dar el pecho mientras se viaja

Cuando viajes, usa ropa cómoda y práctica. Una camisa amplia encima, con una prenda inferior más ajustada y que se baje con facilidad, te dará acceso al pecho en todo momento y será más discreto cuando amamantas. Si viajas con el bebé cargado en un canguro, ofrécele el pecho cuando todavía se encuentra sentado en él. Para hacer el proceso más cómodo, ajusta las tiras del accesorio a la altura del pecho.

Si viajas por carretera es preferible hacer una parada discreta antes de ofrecer el pecho al bebé, ya que podría marearse por el movimiento del coche. Planifica la ruta con suficientes áreas de servicio para que el proceso sea seguro y cómodo para la familia. Si llegas a una ciudad nueva, averigua donde puedes amamantar al bebé sin problemas. En muchos centros comerciales, por ejemplo, hay lugares adecuados para esta necesidad.

Amamantar durante un vuelo o en tren

Infórmate sobre las políticas de lactancia antes de seleccionar una línea aérea. Además, es bueno que sepas que los mejores momentos para amamantar al bebé son durante el despegue y el descenso del avión. El acto de succión ayuda a compensar el cambio de presión que experimenta su oído medio, evitando molestias durante el viaje.

Durante los viajes en tren los niños menores de dos años pueden viajar sin problemas en los brazos de su madre, por lo que será fácil elegir el momento para alimentarlos. Organízate con tiempo y reserva un asiento de ventanilla para que puedas amamantar con tranquilidad.

La lactancia cuando llegamos al destino

Una vez en el destino es probable que los bebés o niños/as más mayores cambien su patrón de tomas. Lo más normal es que mamen mucho más. Si el destino es un país tropical o con clima caluroso recordar que la lactancia materna no deja de ser un líquido y sólo por el calor pueden incrementar las tomas.

Por otro lado, algunos niños se sienten inseguros ante las novedades y se aferran más al pecho como fuente de seguridad. Una vez se adaptan o conocen las nuevas circunstancias, dejan de estar tan “enganchados”. Pero vale la pena estar advertidos porque niños de 2 años pueden llegar a mamar tanto como un bebé recién nacido.

También puede ocurrir que durante el año la madre trabaje o esté ocupada en la organización familiar y el viaje signifique estar las 24h con la madre y ellos “disfrutan” de esa circunstancia.

La lactancia de viaje por el mundo

La aceptación de la lactancia materna en público puede ser diferente en cada país, dependiendo de las costumbres y culturas locales. Por nuestra experiencia no suele haber problema, especialmente en zonas rurales y en países en vías de desarrollo. Quizá pueda producir cierto reparo en Europa y especialmente en EEUU o en ciudades “occidentalizadas”. Una recomendable manera de pasar ”desapercibida” son las mochilas portabebés.

En general puede llamar la atención ver a una blanca, europea occidental dar el pecho, pero no de forma peyorativa o mostrándose explícitamente negativos hacia ella, más bien es causa de sonrisas y complicidad.

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