En Asturias tras la pista del oso pardo en familia
Última modificación:
Hace años que le habíamos puesto el ojo a este viaje, nos apetecía mucho hacer una ruta en familia tras la pista del oso pardo por Asturias para descubrir las comarcas donde habitan estos hermosos mamíferos. Y por fin, este verano, pudimos hacerlo.
El punto fundamental y todo un acierto fue participar en los Campamentos Oso Pardo, alojados en el Albergue Vega del Horreo,
Este alojamiento rural está situado en la aldea del mismo a 7 kms de Cangas de Narcea comarca de las Fuentes de Narcea, una joya natural del suroeste asturiano limitando con León y Lugo.
Sus reclamos más conocidos además del oso son el bosque de Muniellos, declarado reserva Unesco de la biosfera y el antiguo monasterio que alberga hoy el espléndido y galardonado Parador de Corias.
Los protagonistas de esta aventura osera que formó parte de nuestro road trip que pasó antes por Navarra, Cantabria son:
- Mi hijo y un servidor en un mano a mano viajero padre-hijo con ganas de huir del sofocante calor
- Chema, el responsable del alojamiento y nuestro guía de montaña
- Una familia amiga formada por Roberto y Raquel y sus dos hijos peque-naturalistas Lucas y Matías que nos acompañaron en los campamentos Oso Pardo.
CAMPAMENTOS OSO PARDO
Los campamentos Oso Pardo es una fórmula que se celebra varias ediciones en verano, una de ellas dedicada en exclusiva a las familias con niños, otra solo a adultos y unas cuentas dedicadas a campamento infantil-juveniles...una auténtica escuela de castores.
Nuestro campamento duró cinco días de agosto con alojamiento, las comidas (cocina casera!) y todas actividades incluidas incluyendo las salidas guiadas a la naturaleza. El resto del año, fines de semana y puentes, se organizan las Jornadas de observación del Oso Pardo abiertas a las familias con niños que en invierno se centran más en la observación del lobo así como especiales sobre setas.
Cinco días de campamentos oso pardo en familia en Asturias en los que disfrutamos como cosacos. Entre hórreos y rodeados de las montañas de exuberante verdor que han visto la recuperación de la población de osos y donde también habita el lobo.
Toda una gozada, compartir intensos momentos juntos a los peques, lejos de las pantallas, sin acordarse de ellas, correteando felices, descubriendo el entorno natural y haciendo nuevos amigos. Resumiendo, siendo niños y teniendo infancia, todo un lujo en estos apresurados tiempos que nos y les ha tocado vivir.
Entre las actividades de este campamento destacan las excursiones para aprender a observar la naturaleza y sus rastros escuchando las explicaciones de alguien como Chema que ha hecho de la pasión por la naturaleza en su profesión como guía naturalista y alma mater del albergue de Vega del Horreo.
Un imán para los niños contando las historias asturianas ancestrales de personajes de la mitología astur-leonesa como las xanas que habitan los ríos o los juguetones trasgus y diablos burlones que todavía se cuentan en estos valles.
El primer día de campamentos subimos día subimos de excursión a una antigua braña (cabañas de pastores) a hablar con uno de los últimos habitantes del valle que aún viven en ellas, descubrimos rastros y observamos rebecos y águilas reales con los prismáticos y descubriendo un árbol al que les encanta bajar a frotarse a los osos.
Y como andan los niños cuando están motivados en compañía de otros niños! Aquel día al acabar el camino nos dimos un merecido baño en un río con las aguas tan frías como transparentes.
Otro día dormimos en vivac que por la lluvia fue en tienda de campaña junto a un refugio seguro que observados por algún curioso oso al que no tuvimos la suerte de observar nosotros.
Al día siguiente nos esperaban en Guarida del Cunqueiro donde participamos en una demostración de tornería y descubrimos como eran los taper ware versión madera de hace doscientos años para la ancestral cultura cunqueira (tixileira) que esta tienda-museo de artesanía mantiene viva y que es propia de los pueblos de El Bao y Sisterna pertenecientes al concejo de Ibias.
Los campamentos se centran en el paisaje y...en el paisanaje. Flora, fauna, pero también interés y relación con los vecinos de una comarca que sigue atesorando una forma de vida ancestral marcada por una etapa de minería del carbón que recientemente cesó todas sus actividades.
En el precioso pueblo de Posada de Rengos tuvimos la suerte de conocer a la promotora de Con Xaldas y a lo loco que hospitalaria, afable y paciente nos mostró y pudimos practicar algo del oficio a tejer con la lana de la especie local de oveja, las simpáticas xalda.
Ese día también día visitamos el molino de harina con los mecanismos de madera que todavía funciona en la comarca con la corriente del agua del río Narcea y estuvimos charlando con el molinero. Brutal!
Durante los campamentos estuvimos también paseando por la aldea en la que está el albergue, visitando a productores de miel, charlando de forma espontánea con las personas del lugar en un lugar donde tiempo y la sana curiosidad de conversar a los visitantes todavía no se ha perdido.
Y claro también bebimos buena sidra y ricas empanadas de bonito compartiendo inolvidables sobremesas donde hemos redescubierto que las personas podemos tener conversaciones donde aprender de los demás si somos capaces de olvidarnos el tiempo suficiente de los incesantes reclamos de los smartphones.
Expedición campamento familiar Oso pardo en Asturias 2022. Foto de Roberto Yustos
Como queriendo irnos despacito, saboreando sin prisas la estancia en las Fuentes del Narcea nos quedamos en el albergue una noche extra para ir a recorrer los paisajes de la muy panorámica Ruta de los Puertos y caminar por los parajes que rodean el bosque de Muniellos (pues la entrada está restringida con reserva previa)
Felices de haber pasado cinco días de vacaciones de verdad, iba a decir, como las de antes, un tiempo para desconectar de lo que nos agobia y reconectar con lo que nos reconforta, haciendo amistades, entre paisajes verdes, fresquitos y lejos de las masificaciones.
EL ALBERGUE VEGA DEL HÓRREO
El pequeño y coqueto albergue Vega del Hórreo está situado en el pueblo del mismo nombre a 7 kms de Cangas de Narcea. Ocupa el espacio de la antigua escuela recuperada y rehabilitda para un nuevo uso social ya que es de propiedad municipal y fue reformada con materiales y técnicas del lugar razón por la que trasmite una sensación genuinamente montañera y acogedora.
Con una capacidad para 16 personas este alojamiento tiene 2 habitaciones con ducha de 8 plazas cada una (que pueden cerrarse para el uso de una sola familia), calefacción, aparcamiento, jardín, servicio de cenas, desayunos y comidas caseras con posibilidad de menús vegetarianos bajo petición. El albergue Vega del Hórreo admite mascotas y cuenta con un solvente wifi via satélite, microondas y lavadora.
De forma complementaria o separada del albergue Chema ofrece sus servicios como guía de naturaleza a través de Natur Naturaleza y Turismo.
EL OSO PARDO CANTÁBRICO
El oso pardo cantábrico forma parte del trío de depredadores más emblemático y molón de la península junto al lobo y al lince ibérico. Los osos pardos cantábricos son criaturas fascinantes, tan tiernas como salvajes.
La presencia de una población afortunadamente recuperada y viable de osos pardos nos da cuenta de un ecosistema sano y bien conservado fuente de riqueza natural y económica ya que actualmente es un polo de atracción de visitantes fundamental para estas comarcas donde la minería ya es cosa del pasado.
Osos pardos en las montañas del Fuentes del Narcea. Foto cedida por Chema Diaz de Natur Naturaleza y Turismo
En nuestra estancia en los campamentos no pudimos divisar ninguno, con la ilusión que nos hubiera hecho. Y es que la fauna salvaje es muy informal para esto de las citas. Vaya, que ninguna empresa puede garantizarte al 100% el avistamiento y mira que fuimos a lugares muy propicios y dedicamos tiempo a la observación.
En cualquier caso el avistamiento de los osos es más fácil en la época de apareamiento, así como en los meses de otoño cuando salen a comer los ricos frutos del bosque de esta estación. En verano y sobre todo en invierno es casi imposible verlos. Chema es un especialista total en la materia, se sabe los trucos y los mejores momentos y maneras para poder divisarlos.
Muchas personas que no se han informado lo suficiente pueden tener ideas equivocadas sobre el oso pardo cantábrico, cuya fiereza o peligrosidad es incomparablemente inferior a la que tiene, por ejemplo, una especie como el oso grizzlie que habita en Canadá.
Los osos pardos se alimentan casi en su totalidad de frutas, frutos secos y animales muertos. En contadas ocasiones puede atacar a un ternero u oveja.
Respecto de los humanos (con los que mantiene una relación ancestral) en los 25 últimos años solo se han contabilizado 6 malos encuentros ninguno de ellos con resultado mortal. Ante un encuentro fortuito a corta distancia con el humano el oso suele salir corriendo.
Las observaciones con guía naturalista siempre se realizan en lugares no invasivos y a distancias prudenciales para el disfrute de la experiencia. Algo parecido a lo que ocurre con los delfines, observar osos (o lobos) en libertad es una experiencia incomparable a hacerlo en un zoo, una de esas cosas que no se olvidan.
DESTINO FUENTES DEL NARCEA
La belleza de Asturias no se acaba en los muy visitados Lagos de Covadonga y los Picos de Europa, el Parque Somiedo, el triangulo urbano de Gijón-Avilés-Oviedo o el descenso del Sella. Esta comunidad cantábrica de raíces celtas, fuerte personalidad y lengua propia, es mucho más y siempre sorprende con nuevos atractivos el viajero.
Atractivos de excepción que nosotros desconocíamos hasta este verano, como la comarca y destino turístico de Fuentes del Narcea que comprende las tierras de los concejos de Narcea, Degaña y Ibias y que alberga el parque natural del mismo nombre que con 567 kms2 es nada menos que el espacio protegido más grande de Asturias.
Tierra de raíces celtas como dan cuenta los restos de los antiguos castros y su rica mitología, los romanos establecieron a su llegada importantes minas de oro. La ganadería vacuna, la miel, el vino (existe la DOP vinos de Cangas con variantes de uva propia ganando altas cotas de prestigio) y la minería del carbón (ya desaparecida) eran la base de su economía que cuenta hoy con la creciente supone el turismo rural y de naturaleza que tiene al oso por máximo símbolo.
Con un clima húmedo cálido de lluvias abundantes propio del área atlántica la geología del valle consiste en abruptas montañas de media y alta montaña, con valles muy marcados por los ríos en cuyas vegas proliferan pequeñas aldeas. Entre la vegetación destacan el enebro, el texo (tejo) y el brezo (del que procede su miel más famosa) y árboles caduciformes como el castaño, el roble o el haya que hacen la visita en otoño más que recomendable.
Además de los ya comentados osos y lobos y multitud de mamíferos y aves como el águila real e imperial o el quebrantahuesos, destaca el urogallo, otra especie autóctona, bella y emblemática de la cordillera cántabra que esperamos salga de la lista de especies en extinción con diversos programas en marcha.
Podríamos hablar mucho más de este parque natural que tanto nos sorprendió. De la palloza, la casa tradicional, o tradiciones como la cerámica negra, de la artesanía cunqueira y de sus típicas madreñas, o de bellas aldeas que parecen colgadas en el tiempo como Bisuyu, Xinestosu, Trescatru o Xendré...
Totalmente recomendable visitar Cangas de Narcea. La capital de la comarca que celebra cada sábado su animado mercado, llegó a ser durante siglos una rica e importante ciudad comercial debido al paso de la antigua ruta que unía Oviedo con Burgos y Madrid.
El invierno es el mejor momento para ver al lobo. Foto cedida por Chema Diaz de Natur Naturaleza y Turismo
Pero no nos queremos extender en exceso ni tampoco nos dio tiempo a conocer tantas cosas. Además, como ya sabe cualquier viajero que se precie, siempre hay que dejarse algo para la siguiente visita, porque desde luego...volveremos!
EL BOSQUE DE MUNIELLOS
En Tablizas, concejo de Ibias, como santa santorum del Parque Natural de las Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias se encuentra el bosque de Muniellos una joya verde absolutamente especial pra cualquier amante de la naturaleza que merece un destacado.
Se trata de un bosque de una pureza casi primigenia, declarado reserva integral goza de la mayor protección tal y como corresponde a uno de los pocos bosques primarios que quedan no solo en la península ibérica sino en toda Europa.
Todo un paraíso para la flora y la fauna que ocupa una superficie de 58,5 km² e incluye tres montes: Muniellos, La Viliella y Valdebios con una altitud que altitud va de los 680 m en las zonas más bajas hasta los 1645. Ha sido declarada reserva de la biosfera Unesco
Aunque no pudimos pasear por su interior, si que es posible caminar libremente entre el pueblo de Moal hasta el centro de visitantes, una pista forestal de 4kms que bien vale la pena así como una visita al Centro de Interpretación de La Reserva Natural Integral de Muniellos.
Desde los caminos y miradores que lo rodean se puede divisar y sentir el bosque y reserva de Muriellos, su biodiversidad y la limpieza del aire que predomina en la zona del que da cuenta la proliferación de líquenes por doquier. Toda una experiencia!
Muniellos goza por tanto uno de los aires más puros y saludables de toda España. Compuesto de formidables robles, castaños y hayas, su belleza es especialmente apreciable con otoño debido al formidable espectáculo cromático que ofrece el cambio de hojas.
Un premio si has llegado hasta aquí. El acceso al bosque de Muniellos está restringido a la visita de solo 20 personas por día (no permitida la entrada con mascotas) bajo reserva previa a partir del 15 de diciembre para el siguiente año a través de este enlace.
+ INFO
