10 destinos de Europa perfectos para recorrer en bicicleta con niños

¿Estás buscando un plan original para el verano?. ¿Necesitas unas vacaciones diferentes en familia?. ¿Con ganas de hacer un viaje en bicicleta con niños por rutas de dificultad baja o media?. ¿Sois un grupo de amigos que os apetece compartir una aventura con buenas dosis de cultura, paisajes preciosos y ambientes distintos?.

En esta entrada te vamos a descubrir una selección de algunos de los destinos más célebres y mejor preparados de Europa para recorrer en bicicleta en familia.

A pedalear se ha dicho! No vamos a:

 1- Valle del Loira

Recorrer todo el área de influencia de los castillos del Loira, no solo nos ayudará a descubrir paisajes con muchísimo encanto y construcciones históricas de película, sino que también nos ayudará a conocer una zona muy rica en vinos, algo que a los padres puede que también les interesantes. En la región existen empresas que ofrecen servicios de asistencia para guiar a las familias que viajan en bici. También ponen a vuestra disposición vehículos para transportar el equipaje y organizan una serie de visitas a bodegas, castillos y ciudades.

Bajo la marca “El Loira en Bicicleta” se extienden mas de 600 kilómetros de rutas balizadas a lo largo del Loira y sus afluentes, una zona inscrita en la lista del patrimonio mundial de la UNESCO debido en gran parte a sus 2000 años de historia. No podemos perdernos la visita a los castillos de Chambord, Chenonceau, Cheverny, Chaumont-sur-Loire o Villandry..., y por supuesto el centro histórico de Orleans, Blois y Tours.

Esi sí, deberemos tomárnoslo con calma, pues por experiencia personal, diremos que los niños cuando visitan tres castillos, ya han cubierto el cupo de visitas…y es entonces cuando debemos tirar de imaginación y fantasía para seguir con la moral alta. Es importante saber que Hergé se inspiró en el castillo de Cheverny a la hora de diseñar Moulinsart, la casa del capitán Haddock, Tornasol y Tintín que los fans del joven reportero belga descubrieron en el libro y la película El Secreto del Unicornio.

El Loira en bicicleta contribuye a la ordenación sostenible del territorio. Atañe directamente el medio ambiente, su protección y su valorización. El itinerario se integra completamente en los paisajes recorridos. Permite disfrutar plenamente de las orillas del Loira, los viñedos, los castillos y otros parajes extraordinarios. Genera actividad. El recorrido está organizado de tal manera que no daña el medio ambiente, sino que permite valorizarlo. DiscoverFrance.com es un buen punto de partida para las familias que pedalean con calma.

2- Windermere, Distrito de los Lagos, Reino Unido

Escocia es una maravilla, una gozada para disfrutar en familia, pero un poco mas abajo encontramos otra de las grandes maravillas del Reino Unido. Siempre que haga buen tiempo, hay pocos sitios más bellos que el Distrito de los Lagos en Inglaterra, ¿y qué mejor forma de descubrirlo que sobre dos ruedas, en familia, con la brisa acariciándonos el pelo y la luz del sol destellando en el agua?. La magia de las islas se disfruta mucho mas viajando en bici con niños. Estamos hablando de un terreno ondulado lleno de bellísimos rincones, rodeados de cumbres y valles escarpados que vierten las aguas de sus ríos a lagos profundos y cristalinos.

Si os gusta pedalear y disfrutar de paisajes impresionantes en bici, el Parque Nacional del Distrito de los Lagos es el lugar perfecto para pasar varios días con los niños. Estamos hablando de una zona muy rica en montañas, donde encontramos el Helvellyn Peak,  la tercera cumbre más alta de Gran Bretaña.

Recomendamos tener a mano la Guía de los lagos de Wordsworth, pues nos ayudará a descubrir varios valles desde la barandilla de un barco de vapor, visitando de paso los antiguos pueblos mineros de Lakeland que recuerdan a las singulares historias de Beatrix Potter y sus conejos. Los mas pequeños disfrutarán con los ponis de pelo aterciopelado y las mofletudas ardillas rojas que viven en Wainwright. A la hora de la merienda, no podemos perdernos el pastel favorito del condado de Cumbria, el Kendal Mint Cake, que nos proporcionará un aporte de energía para seguir pedaleando en familia.

Si disponemos de pocos días, puede resultar muy interesante dar una vuelta de 45 kms que incluye vistas sobre Rydal Beck y Loughrigg. Si el día acompaña, los niños agradecerán pararse a tomarse un chocolate caliente y una porción de tarta recién hecha en el centro del Parque Nacional de Brockhole.

3- Menorca

El 8 de octubre de 1993 Menorca obtuvo el reconocimiento de la Unesco como Reserva de la Biosfera. Esta designación pone de relieve el alto grado de preservación paisajística y medioambiental de la isla, con una población que valora y respeta este privilegiado entorno, y que debiera ser seguido como modelo de desarrollo del turismo sostenible. Menorca se está convirtiendo rápidamente en un paraíso para ciclistas y para familias que disfrutan de la bicicleta con niños. Es un terreno para rodar ideal, ya que mezcla partes llanas con suaves colinas, rodeados por una cultura y unas gentes realmente entrañables.

A lo largo de la isla encontramos  muchas cafeterías y restaurantes que ofrecen recambios para bicis así como refrigerios para los ciclistas hambrientos. ¡Mucho ojo porque el viento puede soplar muy fuerte y el sol pica muchísimo en julio y agosto, así que la mejor época para un viaje en bicicleta por Menorca, sin aglomeraciones, puede ser durante la primavera y el otoño, pero si no podemos combinárnoslo, a principios de julio siempre disfrutaremos mucho mas que en agosto.

Menorca es una isla ideal para viajar con niños en bicicleta. Las distancias entre los puntos de interés son relativamente cortas y los paisajes naturales son fantásticos. Otra ventaja de hacer cicloturismo en Menorca es que en la isla no hay grandes desniveles. El punto más alto de la isla es el Monte Toro con 358 metros de altura.

Existen muchos caminos para ir en bici ideales para recorrer Menorca con calma. Es importante mencionar que existen seis vías señalizadas que nos pueden ayudar a recorrer la isla de este a oeste. Dependiendo del tiempo y el nivel, las vías pueden resultarnos útiles a la hora de planificar una semana de vacaciones cicloturísticas con niños por la isla.

La primera parte de Ciudadela y nos conduce hasta Ferrerías. La ruta tiene una duración de algo mas de una hora y no llega a los 20km. Resulta ideal para que los peques entrenen sus piernas por un terreno que no tiene ningún tipo de complicación. Una segunda ruta cubre la distancia entre Ferrerías y Es Mercadal y aquí el terreno ya no es tan fácil, pero si tenemos un poco de preparación, en menos de dos horas nos zampamos 16km. Otra ruta fácil es la que conecta Es Mercadal con Alaior en poco mas de una hora (8km) y una vez en Alaior podemos acercarnos hasta Mahón en hora (12km) dando un cómodo paseo.

Si queremos subir un poco el nivel podemos pedalear el recorrido de Mahón a Es Castell, para llegar hasta San Luis cómodamente. Todo el recorrido puede que nos ocupe unas dos horas, sin prisas, pues Menorca es una isla que invita a dejar el reloj en casa.

Recomendamos la guía de Sergi Lara "Menorca, la vuelta en kayac y cicloturismo", una guía muy interesante para familias, pues nos permitirá conocer la isla de Menorca de una forma respetuosa, practicando dos actividades ideales para este nuevo terreno de aventura: navegando en kayak de mar siguiendo el contorno de una de las costas más maravillosas del Mediterráneo y pedaleando por el interior de su amable geografía a caballo de nuestra bicicleta. La vuelta en kayak a la isla ha sido estructurada en 8 etapas, y la ruta cicloturista es un recorrido lineal entre Ciutadella y Maó que podrás realizar en 2 cómodas jornadas. Cada etapa propuesta se encuentra pormenorizadamente descrita, con su correspondiente ficha técnica y mapa, todo ello ilustrado con la fotos más representativas.

4- Isla de Wight, Reino Unido

Recorrer la Isla de Wight en bici y con niños implica dejarse llevar, sin prisas, disfrutando del paisaje y la calma de una isla que se permite el lujo de celebrar una vez al año y de los festivales de música mas importantes del Reino Unido, el festival de la Isla de Wight.

Foto © Vivir Europa

En la isla de Wight, pedalearemos tranquilamente a lo largo de unos 100 kilómetros, durante varios días (la mayoría de familias suelen repartir el trayecto en etapas no muy largas), realizando entrañables paradas en pueblos de pescadores como Yarmouth y Benbridge. En dichas poblaciones, los niños disfrutarán de un entorno natural único en las islas británicas, avistando aves y fauna marina que vive en su hábitat natural, construyendo sus nidos a lo largo de costas de película.

La Isla de Wight es una versión en miniatura de Gran Bretaña, y a nivel histórico, resulta mas que interesante su visita. Para los niños recomendamos el Neddles Park, un simpático parque temático situado en Alum Bay. Resulta curioso e interesante a la vez bajar el acantilado en telesillas y acceder así a la playa. Desde allí podreis disfrutar de un dia de playa y llegar en lancha motora hasta los famosos The Needles que se alzan en el mar frente al extremo occidental de la isla y que se consideran una de las maravillas naturales del sureste de Inglaterra.

Tal y como sucede en Irlanda (otro país que se puede recorrer con calma en bici) aunque el terreno sea llano, raro es el día que no sopla el viento, por tal motivo, deberemos estar preparados. Un buen Windstopper y un calzado con Gore-Tex resultarán indispensables para cualquier salida que realicemos en familia. Cada año se organiza una prueba oficial, la Isle of Wight ride, en la que todo el mundo puede participar.

5- Benelux

¿Quién dijo que en los Países Bajos no hay desniveles ? La zona del sur, cerca de Spa y Luxemburgo, donde está Ardennes (famosa por su batalla de las Árdenas) tiene colinas onduladas y algún que otro descenso empinado (de hasta el 25%). Además, la oficina de turismo tiene documentadas una serie de rutas ciclistas que para ir con niños resultan ideales a la hora de mezclar historia con deporte y ocio familiar. Spa es la ciudad originaria de las escapadas de bienestar y masajes... ¿qué mejor que ganarte una buena sesión de relajación que con un circuito por las colinas de alrededor, los bosques frondosos y las carreteras serpenteantes?

Si buscáis más aventuras, podéis ir a la Flèche de Wallonie sportive (cuatro distancias señalizadas de entre 81 y 219 km), que se celebra cada mes de mayo.

Recorrer toda la costa holandesa, conectando Amsterdam con Rotterdam, pasando por La Haya es una gozada. Y si pasamos unos días en La Haya, resulta muy recomendable acercarse en bici hasta Zoetermeer, donde encontramos un precioso lago que podemos rodear en una hora, descansando en pequeñas playas que se llenan de bañistas en verano.

La costa holandesa y belga, en verano, es ideal para disfrutar en familia. Si la meteo acompaña, las temperaturas relativamente suaves nos ayudarán a pedalear, alejados de la habitual canícula mediterránea. Y ya que estamos, Luxemburgo es otro destino familiar muy a tener en cuenta a la hora de ir en bici con niños. Los alrededores de Kautenbach, donde se llega en tren, son una gozada.

6- Cerdeña, Italia

Sardegna o Cerdeña, para muchos la isla mas bella del Mediterráneo, ofrece un abanico impresionante de itinerarios para descubrir la magia de sus tierras con niños. Una de las rutas mas interesantes para pedalear con niños empieza y termina en Alguer (donde llegan vuelos desde España) siguiendo la ruta en sentido horario por el norte de la isla, lo más pegado al mar posible.

El alojamiento suele ser más económico en B&B y en campings, algunos muy buenos y situados en la costa, siendo obligatorio reservar con tiempo, debido al interés turístico de la isla en agosto. Si podemos viajar en junio o en septiembre, disfrutaremos mucho mas de la paz y la tranquilidad de sus pueblos y carreteras, así como de los restaurantes y bares donde podemos saborear una gastronomía exquisita.

Todo el norte de la isla, desde Capo Caccia y el Parque Natural de Porto Conte a Santa Teresa Gallura y La Maddalena, es una maravilla. Pasaremos por Stintini, Porto Torres (donde llegan los barcos de la Grimaldi), Castelsardo, Badesi, Vignola-Mare, descubriendo paisajes de gran belleza, con el estrecho de Bonifacio como telón de fondo.

En Santa Teresa Gallura nos podemos acercar en bici hasta el Capo Testa, donde encontramos algunas de las formaciones rocosas mas espectaculares de todo el Mediterráneo. Los niños (y los no y tan niños) disfrutarán trepando por unas rocas que no ofrecen ninguna complicación si llevamos un buen calzado con suelas Vibram.

Ya en la costa este,  (Costa Esmeralda), a la altura de Siniscola podemos cruzar hacia el interior, o bien llegar en coche hasta Ozieri, desde donde podemos realizar rutas en BTT muy tranquilas. Si queremos pedalear en zonas de montaña, el macizo del Genargentu ofrece varias carreteras asfaltadas que nos ayudarán a recorrer el techo de la isla, llegando hasta la pequeña estación de esquí del Bruncu Spipina.

Viajar a Cerdeña con niños es muy agradable gracias a la calidad y seguridad de sus playas y las estupendas posibilidades de hacer senderismo o conocer pequeños pueblos en la isla. También se puede visitar el sitio arqueológico de Anghelu Ruju o montarse en el Trenino Verde, una experiencia muy curiosa e interesante que nos ayudará a mezclarnos con el sabor de la isla.

7- Las Landas

Ideal para viajar con niños en bicicleta, Las Landas se han convertido con el paso de los años, en un destino familiar y cicloturístico de primer nivel. Se encuentran al sudoeste de Francia, en la región de Aquitania, a escasos 80 kilómetros de Donosti y junto al Océano Atlántico. En el norte, comparten espacio con la región de la Gironde,  una zona muy verde e ideal para recorrer con niños en bicicleta pues encontramos un magnífico carril bici a lo largo de prácticamente toda la zona.

La mayoría del pedaleo transcurre por carriles-bici asfaltados y sin prácticamente desniveles, resultando una ruta segura y fácil. La región de Gironde posee una de las mejores redes de carril-bici de toda Francia. Desde Bayona a Arcachon recorremos paisajes de gran belleza, de forma tranquila, disfrutando del paisaje, la gastronomía y la hospitalidad de los habitantes de una de las regiones mas interesantes del oeste francés.

Si decidimos realizar una estancia mas corta, podemos alquilar las bicis en Seignosse por 10-8€/día completo, aunque en verano existen muchos puntos de alquiler. Recomendamos visitar la Reserva Natural del Estanque Negro que protege una zona de humedales y alberga una exuberante flora. Al estanque se accede por una pasarela de madera de 1km que serpentea por el bosque pantanoso. La bici hay que dejarla amarrada antes de acceder por la pasarela. Es un paseo agradable, ideal su vamos con niños pequeños; a pocos metros encontramos el Estanque Blanco, un enorme y tranquilo lago cerca de Soustons.

Otra zona interesante es la que rodea Hossegor con su paseo marítimo y sus apetecibles playas de arena finísima. Acercarnos hasta Capbreton resulta igual de interesante, sin olvidar Arcachon, bonita población situada en la zona mas al norte. Cruzar en barco la Bahía de Arcachon hasta Cap Ferret nos ayudará ahorrar un buen puñado de kilómetros.

Recomendamos visitar la Isla de los pájaros y las cabañas flotantes, donde podemos admirar en libertad a numerosas especies de pájaros: golondrinas de mar, zarapitos y otras aves acuáticas... Ante ella, se elevan las Cabanes Tchanquées (cabañas sobre pilotes), símbolo de la Bahía de Arcachon. Si llegamos hasta Biscarrosse, descubriremos su hidrobase, desde donde parten vuelos en hidroavión.

8- El Danubio

Si estáis pensando en hacer un viaje especial con niños en bicicleta, sea en primavera, en verano o en otoño, la ruta en bici del Danubio puede ser ideal, ya que es apta para los mas peques, y siempre es un buen motivo para un viaje en familia que atraviesa zonas históricas de gran belleza. En opinión de muchos padres viajeros, el mejor tramo de la ruta para hacer en familia es la parte de Austria: desde Passau hasta Viena, pero existen otros tramos igual de interesantes. Estamos hablando de una ruta familiar con un desnivel muy suave.

En Engelhartszell podemos visitar el único Monasterio trapense de Austria, e incluso realizar una pequeña degustación de licores en el convento. Continuamos nuestro camino hacia el impresionante Schlogener Loop, donde el río hace una curva completa de 180 grados. También podemos realizar una pequeña excursión a Enns, la ciudad más antigua de Austria. Esta etapa nos guiará a través de hermosos y tranquilos prados del interior del país, destacando el pueblo Celta de Mitterkirchen, sin olvidar la magnífica región de Wachau y los bosques que rodean Viena. 

La zonas que conecta Austria y Alemania puede que sean las más prácticas para viajar en bici con niños. La ruta del Danubio en la zona alemana transcurre en varios tramos por caminos de tierra, además de que en algunas zonas se separa más del río y hay más cuestas. En cambio, en la zona de Austria la ruta está totalmente pavimentada y separada de los coches en su mayor parte, es muy llana (bajando ligeramente todo el rato) y la logística de apoyo (que os la contamos en el siguiente apartado) es muchísimo más sencilla. Tanto en Austria como en Alemania tenemos un montón de servicios alrededor de la vía.

Para las familias aventureras que dispongan de tiempo, recomendamos una interesante guía publicada por Desnivel, El Danubio en bici donde se detalla la ruta cicloturista del Danubio, uno de los itinerarios más populares de Europa y que cada año lo recorren miles y miles de aficionados de todas las edades y niveles. El río es el motivo principal, el eje que da sentido a un camino en el que podemos elegir principio y final. En el libro se recorre el Danubio desde su nacimiento en la Selva Negra alemana hasta su llegada a Budapest, casi 1.300 kilómetros después, en la gran llanura húngara.

Sea en itinerarios cortos, o en rutas de varias semanas, el Danubio es y será una fuente inagotable de experiencias y aventuras en familia.

9- El Valais suizo

Suiza es un país ideal para recorrer en bici con niños, existen rutas específicas que nos ayudarán a disfrutar de itinerarios de ensueño de un modo práctico y cómodo. Uno de los cantones mas espectaculares para recorrer en bici es el Valais, una maravilla para los amantes del turismo familiar en general. En cada valle recóndito que descubrimos, encontramos rutas para BTT realmente espectaculares, pero si queremos ir por llano, podemos viajar desde el Lago Leman hasta Andermatt de un modo muy tranquilo, ganando altitud muy lentamente hasta Brig, para ir subiendo poco a poco hasta la base del Furka. Otras opciones son recorrer los valles de Heremence, Evolene o Leukerbad en bici, subiendo tranquilamente, sin prisas.

Existen carriles bici perfectamente señalizados que nos ayudarán a descubrir ciudades como pueden ser Martigny, Sierre o la capital del Valais, la preciosa Sion, con sus torres de la Valere y el Tourbillon. Las familias amantes del queso se pondrán las botas con la raclette y muchas variantes mas, así como con el excelente chocolate que venden en centenares de tiendas y en supermercados.

Desde Visp, podemos subir en tren hasta Stalden y llegar hasta Saas-Fee o Täsch en bici, recorriendo tranquilamente uno de los altiplanos mas bellos del sur de Suiza no tiene precio. Desde St. Niklaus parten los buses hasta Grächen, otra maravilla donde encontramos magníficos itinerarios en bici con los niños. Dejarse llevar por la magia de Verbier o Crans-Montana, donde podemos recorrer en bici varios circuitos, incluso alguno realmente potente para expertos en BTT. Dormir en campings o incluso en refugios de montaña donde podemos llegar con nuestras bicis es una experiencia mas que interesante para vivir con niños.

En Zermatt existen itinerarios señalizados ideales para familias con niños que recorren caminos asequibles para todos los niveles, algunos a mas de 3.000m de altitud. Existe un forfait en verano en el que podemos subir nuestras bicis en los telecabinas, el cremallera de Gornergrat o en el funicular de Sunnegga y disfrutar de unos descensos tranquilos rodeados por cumbres de mas de 4.000m y por el omnipresente Matterhorn (Cervino).

10- El Ticino (Suiza)

Y para terminar, nos vamos al Ticino, el cantón mas italiano de Suiza; todo un paraíso donde disfrutar de varias semanas de vacaciones en familia. La belleza del Ticino y sus gentes, junto con su gastronomía y sus lagos, le convierten en una de las zonas más interesantes para descubrir en bici con niños. En el Ticino nos esperan itinerarios para todos los gustos, niveles y edades, desde cómodos paseos junto a lagos inmensos, a rutas en BTT por caminos escarpados.

Desde Lugano o Locarno podemos realizar varias rutas tranquilas, descubriendo los castillos de Bellinzona (la ciudad mas italiana de Suiza), la Madonna del Sasso, el Laguetto di Muzzano, el Monte San Giorgio y el precioso tren del Centovalli. La línea del Centovalli (casi 60 km) recorre viaductos vertiginosos, gargantas de gran profundidad, cascadas estruendosas, luminosos bosques de castaños y fértiles viñedos de montaña, además de una serie de túneles y estrechas curvas.

En un recorrido de casi dos horas de duración se viaja desde Locarno, a orillas del Lago Maggiore (Lago Mayor) a Domodossola, en Italia, a través del Centovalli (Cien Valles). Ese es el nombre del valle del torrente del Melezza, con sus múltiples valles laterales, cubiertos por espesos bosques y rocas escarpadas. Con el Centovalli podemos cargar nuestras bicis y realizar excursiones con niños que pueden iniciarse en una de las numerosas estaciones, tanto en Italia, como en Suiza.

En el Ticini, los amantes del cine y de James Bond disfrutarán acercándose en bici hasta la presa de Contra, comúnmente conocida como la presa de Verzasca o la presa de Locarno, es una presa de arco sobre el río Verzasca en el Val Verzasca, donde se rodó la impresionante escena inicial de Goldeneye en 1995. Y no podemos salir del Ticino sin subir en el cremallera del Monte Generoso o el finicular del Monte Brè, desde donde se divisan panorámicas de gran belleza.

Planificar minuciosamente la ruta también puede ser un verdadero placer. En los Alpes y el Pirineo, recomendamos preguntar con antelación en los puntos de información locales sobre las condiciones del recorrido y las previsiones meteorológicas. En función de la época del año y la climatología, esta ruta puede estar cortada o cerrada.

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