- Espere, por favor...
Una Valencia auténtica y divertida, de mar y montaña. La comarca de la Safor es Gandía, Oliva y más allá, infinidad de atractivos ideales para descubrir en familia.
Como sus pueblos llenos de encanto del interior, paisajes y una cuidada oferta lúdica y cultural donde nunca faltan opciones. Museos, castillos hispano-musulmanes, torres vigía, marjales llenos de vida, preciosos cascos históricos, vías verdes, una gastronomía para chuparse y... por supuesto, magníficas playas donde bañarse y retozar. Aquí os ofrecemos unos cuantos planazos para elegir en siete rutas para descubrir la Safor con ojos de niñ@.
A pie, en bicicleta (o a caballo!), esta es una ruta ideal para gozar en familia con niños. Con poco más de 7 km (14 totales de ida y vuelta), el trazado está muy bien acondicionado.
El camino empieza frente al Parc de l’Estaciò, por la calle Tossal de Gandia. Tras salir de la población los primeros 3 kms de esta Vía Verde que discurren entre naranjos hasta llegar a la altura del pueblo de Bellreguard y su playa.
Tras pasar por la localidad de Palmera se aleja del tráfico rodado de los coches para cruzar bajo la carretera que conduce a Piles y por fin a Oliva. Este es el punto culminante del paseo, aunque existe la posibilidad de continuar un km más por el carril-bici hasta la playa de Oliva y darse, si se tercia, un merecido chapuzón en las aguas del mar Mediterráneo.
Para los iniciados, la Safor ofrece la ruta de la Vía Verde del Serpis, con algo más de 24 kms entre Villalonga (Valencia) y Lorcha (Alicante) de los cuales se pueden realizar los que apetezcan. Los dos puntos para no perderse son el muy recomendable del Racó del Duc y el tramo de la vía de l’Antic Trenet, que va desde la Barraca d’Aigües Vives hasta el Pas del Portitxol con un último tramo en término municipal de Benifairó de la Valldigna.
Vale la pena tomarse un tiempo para reposar y aprender más sobre la Safor acercándonos a visitar algunos de sus interesantes museos y centros de divulgación.
Aunque muchos lo desconocen, la Safor cuenta con uno de los yacimientos paleolíticos más importantes de todo el Mediterráneo: la Cova del Parpalló. Dando cuenta de ello el Museo Arqueológico de Gandia que tiene sede en el bello conjunto monumental del Hospital de San Marcos. Con un uso creciente de elementos interactivos, la temática de este museo gira alrededor de la prehistoria, desde los primeros habitantes del Paleolítico hasta la Edad de los Metales así como a las primeras ciudades.
El Museu Casa Mayans de Oliva ocupa la casa que fuera domicilio de Gregorio Mayans y Ciscar (1699-1781) que fuera intelectual clave de la Ilustración en tierras valencianas y españolas. Durante el audiovisual que da la bienvenida y el recorrido por sus dependencias en un estado de conservación excepcional, podremos tener una perfecta idea de como eran las condiciones de vida cotidianas de una familia acomodada del SXVIII
Sin ir muy lejos, el Museo etnológico de Oliva tiene su sede en una casa señorial del siglo XVI. Situada en pleno centro histórico, en él encontraremos una exposición de herramientas y materiales dedicada a la cultura agraria tradicional de Oliva, donde destacan los relacionados con el empleo del agua en la huerta y los cereales, sí como los dedicados a la producción de la seda, el aceite y la naranja.
La visita al Museo arqueológico de Oliva es un perfecto complemento a la anterior. Con sede en la gran casa señorial de la Familia Pascual, ofrece un interesante recorrido por las distintas etapas de la historia de la Safor durante la Prehistoria, las épocas íbera y romana y la Edad Media, tanto en su periodo islámico como cristiano.
Los marjales están conformados por la suma de acuíferos subterráneos naturales, (ullals en valenciano) que emergen en forma de manantiales. Muy presentes en el centro y sur de la comunidad valenciana, los marjales destacan en la comarca de la Safor como uno de los rincones con mayor diversidad y frescor, todo un imán para las familias que buscan naturaleza más allá de las playas.
Entre ellos, os destacamos los mejores acondicionados para pasear:
La Marjal de Pego-Oliva, declarado Espacio Natural Protegido, Parque Natural y zona ZEPA (Zona de especial protección para las aves), es un paraje que ofrece una bonita ruta para hacer con los peques: la Ruta del Riu Salinar. Se puede realizar la versión más corta, la ya señalada del Riu Salinar, o la ornitológica, que empieza junto al parking de la Muntanyeta Verda (espacio protegido con horario de visita regulado) desde la Font Salada o Ullal del Burro. Allí se encuentra una surgencia de aguas termales limpias y transparentes, habilitadas para el baño en cualquier época del año, con temperatura constante de entre 21 y 24 grados. Recomendable pasarse primero por su Centro de Visitantes.
El segundo Marjal para no perderse en nuestro recorrido por la comarca es el Marjal de La Safor (que también cuenta con el Centro de Interpretación Marjal Gandia) con una exposición permanente y material interactivo. De su edificio salen numerosos senderos de madera que recorren el humedal de manera accesible y muy cerca un área de pícnic.
La Safor fue un territorio castigado entre los siglos XV y XVII por ataques de piratas que sembraban el pánico. Como elemento de defensa, para protegerse de su continua amenaza y vigilar su llegada, proliferaron entonces las torres de vigía.
Tiempos convulsos que han sembrado el inconsciente colectivo de leyendas que fascinarán a los peques. Hoy la historia es otra y esas torres de guaita (vigilancia) han sido mantenidas y reconvertidas en puntos de observación y son hoy pequeños tesoros que forman parte de la personalidad de la Safor.
Existe una ruta muy sencilla y fácil, ideal para toda la familia, entre las Torres Guaita de Xeraco y Tavernes. Se trata de un recorrido entre la Torre Guaita de la Vall (en Tavernes de la Valldigna) y la Torre Guaita de Xeraco, camino de poco más de 12 kilómetros de baja dificultad
Seguro que muchos, sin ser conscientes, hemos circulado en alguna ocasión por esta comarca en coche por alguna de sus autopistas que la atraviesan y hemos divisado los restos de fortificaciones encaramados de forma imposible en algún peñón o alta colina, como celosos centinelas.
Durante siglos, La Safor fue el escenario de innumerables batallas y refriegas fronterizas entre los reinos moros y cristianos. La huella de las raíces hispano-musulmanas de la Safor son evidentes en su huerta, norias y acequias, baños y alquerías. No obstante, entre todos los restos arqueológicos que dan cuenta de la gran aportación cultural de una cultura tan avanzada en su tiempo, los castillos y murallas son los más fascinantes.
El castell de Marinyén (o de Alfandech), conocido también como castillo de la Reina Mora, es otro de los imperdibles de la Safor. Aunque el castillo está en ruinas, todavía quedan muchas estructuras en pie ofreciendo unas increíbles panorámicas. El castillo puede visitarse en cualquier momento con un aparcamiento cercano.
El segundo punto de interés de por esta ruta por la huella hispano-musulmana es el Castell de Bairén de Gandía, una fortaleza que fue restaurada en el año 2021 y ofrece visitas guiadas los fines de semana al interior de la fortaleza donde aprender sobre su historia. El acceso a la zona de sus miradores y caminos de acceso a la fortaleza es gratuito y posible cualquier día y hora del año.
Gandia, la capital de la Safor, llamada ciudad ducal, atesora un verdadero universo de posibilidades para las familias. Situada a 70 kms y apenas 45 minutos en coche al sur de la ciudad de Valencia, es uno de los principales destinos turísticos de la Comunitat Valenciana.
Esta es la villa natal de la familia de los Borgia, algunos de cuyos miembros llegaron a papas. Si queréis acercaros y conocer la historia fascinante de esta familia valenciana, no os podéis perder el Palau Ducal.
Primorosamente restaurado y declarado Bien de Interés Cultural desde 1964, se considera uno de los edificios civiles más importantes del patrimonio histórico valenciano. Un lugar lleno de historia y arte que ofrece visitas guiadas abiertas a las familias.
Puedes tirar del hilo y ampliar la información en la web de la Ruta Territorio Borja que incluye un mapa sí como un juego interactivo para enganchar a los peques.
Dos destinos vacacionales consolidados llenos de posibilidades: paseos por el frente marítimo, festival de cometas, visitas subacuáticas, cruceros en catamarán o rutas en bicicleta. Y evidentemente no pueden faltar uno o varios chapuzones en alguna de las reputadas playas tanto en Gandía como en Oliva, todas preparadas para el baño y con todos los servicios. Si tenéis mascota os recomendamos la playa de Ahuir.
Un plan muy especial para los más peques. En Parc del Trenet de Almoines nos esperan sus trenes-miniatura que circulan por túneles y estaciones, un plan muy recomendable para toda la family
El parque está abierto cada domingo por la mañana. A destacar su locomotora de vapor súper molona de 5 pulgadas «Almoines», que funciona exactamente como una locomotora clásica real. El precio de cada viaje es de 2€ por persona. Junto al tren se puede ver de manera gratuita el pequeño museo ferroviario con objetos, documentos y fotos dedicados al antiguo tren Alcoi-Gandia y en la Casa de la Cultura de Villalonga se encuentran unas preciosas maquetas ferroviarias a escala con sus paisajes y estaciones a medida.
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