Descubriendo Pamplona con niños déjame que te compartamos algunas buenas recomendaciones. Al mencionar la ciudad, lo primero que me viene a la cabeza son los encierros de San Fermín, pero la capital navarra ofrece muuucho más para descubrir y gozar en familia durante todo el año.
Pamplona (Iruña en vasco) es una ciudad taaan hermosa, que solo hace falta pasearla perdiéndose en sus calles para pasarlo bien en familia. Taurina como pocas, (aunque de eso nosotros tenemos poco), amable, cordial y alegre. Con mucho verde para llenar el alma, y salpicada de sabores intensos, buen vino, quesos memorables (como el famoso Idiázabal) y pintxos para todos los gustos. Y además, con opciones aptas para todos los bolsillos.
Cómo llegar y moverse en Pamplona con niños
Consulta y compara vuelos a Pamplona desde Madrid, Barcelona, León, Málaga, Valencia y Palma de Mallorca. El aeropuerto se encuentra en Noáin, a 7km aproximadamente de la ciudad. También recibe trenes regularmente, sobre todo de centro y norte-oeste de España, mientras que los del sur del país hacen transbordo en Madrid.
Viajamos con el coche y técnicamente estábamos fuera de la ciudad, pero salvo por las noches, nos movimos sobre todo en bus y caminando para visitar Pamplona. La ciudad cuenta con una buena red de transporte público, y disponen de unas tarjetas recargables, que puede compartir toda la familia. Se compran normalmente en estancos u oficinas de correos y cuestan 2'5 euros, más los viajes que desees abonar.
Apartamentos y hoteles en Pamplona con niños
La oferta de hospedaje en Pamplona es muy rica y variada, capaz de ajustarse a casi todos los gustos y bolsillos. Por experiencia si que os podemos decir que es mejor reservar lo antes posible pues es frecuente que en las épocas de alta demanda no se encuentren plazas.
Puedes consultar apartamentos y un comparador de hoteles en Pamplona con el precio más bajo garantizado. Nuestras recomendaciones para alojarse en Pamplona con niños son:
Fue en el que nos alojamos nosotros. Muy valorable la facilidad para aparcar, ideal para estar alejados del jaleo del centro pero sin perderse nada. El Hotel AH San Fermín de Pamplona es una buena opción para las familias. Se encuentra en la zona moderna de la ciudad a 1 minuto de la parada de un autobús que en menos de 10 os deja en cualquier punto del centro.
Tiene un diseño moderno, con suites amplias, luminosas e insonorizadas que a modo de apartamentos disponen de lavabo y una cocina muy bien equipada y con horno, WiFi gratuito y sala de estar con sofá. Los apartamentos son de 1 dormitorio y familiares de hasta 4 personas. La cafetería del hotel está abierta hasta las 12:00 y sirve el desayuno.
Todo un clásico de la capital navarra, el Gran Hotel de Pamplona con mejor valoración para Familias en TripAdvisor. Habitaciones cómodas, desayuno destacable, atención de primera y, a pesar de estar en plena Plaza del Castillo, el silencio y la tranquilidad que necesita una familia con niños durante las noches.
El Pamplona Catedral es un hotel moderno, de 4 estrellas, emplazado en un convento medieval reformado. Se encuentra en la zona céntrica pero apacible de la Catedral. Ofrecen servicios y atención especial para familias, como alojamiento gratuito para un niño menor de 12 años, siempre que utilice las camas disponibles en la habitación. Una opción de lujo en pleno centro de la ciudad.
Qué ver y hacer en Pamplona con niños
1. Vivir inténsamente los sanfermines
Nosotros tuvimos la suerte de vivir dos días de San Fermines de Pamplona, ya sabes, uno de enero, dos de febrero...Cada año entre el 7 y el 14 de julio la ciudad se sumerge en una fiesta total en que hay momentos para todo y para todo/as.
Ambiente por las calles de Pamplona durante los Sanfermines
No hace falta que acudáis a ningún encierro y tampoco a los toros. Los Sanfermines van más allá del jolgorio y las resacas que se adueñan de las noches de gran parte del centro de la ciudad.
Hay que estar allí para vivirlo y aunque normalmente no sale en la tele en los Sanfermines descubrimos que existen un montón de propuestas dirigidas tanto a las familias pamplonicas como las muchos visitantes que acuden a la ciudad estos días.
Los Txiqui-encierros de Pamplona, corre que vienen!
La oferta para las familias es amplia. A los simpáticos txiqui encierros que se celebran en muchos puntos, las tradicionales comparsas de Gigantes y Cabezudos cada mañana y la Feria de las Barracas (en Parque de Antoniutti) con su gran noria desde hace unos años se le ha añadido el programa con tres espacios diferentes: Kirol Ari en el Parque Media Luna, Menudas Fiestas en la Plaza de la Libertad y Birjolastu en La Taconera que ofrecen durante la mañana y la tarde de forma gratuita un montón de juegos, deportes, talleres y actuaciones para los niños de desde los 2 a los 14 años.
2. Entrar a la ciudad atravesando el Portal Nuevo
Pamplona conserva un espectacular conjunto de edificios fortificados por una cadena de imponentes murallas muy bien conservadas que constituye uno de los complejos bélicos mejor conservados de España (consulta aquí una visita guiada)
Plaza del Castillo, Pamplona
A lo largo de la sucesión de murallas se suceden espacios naturales por los que da gusto dar un paseo. Además, a lo largo de la muralla hay una movida cultural que es imposible perderse.
En la parte baja de la ciudad, del otro lado del río, encontrarás un parking si venís en coche. A los niños les encantará subir al Ascensor de la Calle de los Descalzos y desde ahí caminar hacia el Paseo de Ronda y en dirección hacia la plaza de la Virgen.
Justo en esta plaza encontrarás el Portal Nuevo de Santa Engracia fue construido hacia 1583. Lo que vemos actualmente es una remodelación de 1907; además, en 1950 se sustituyó el puente de metálico por uno de piedra. No dejéis de experimentar con el espectacular efecto sonoro que crean las torres del portal y sus bóvedas. ¡Una estupenda bienvenida a la ciudad!. Una buena recomendación para situarte es dejarte llevar apuntándote a una visita guiada por lo mejor de Pamplona gratis para los menores de 12 años.
3. Recorrer las murallas de Pamplona, por el Paseo de Ronda
Desde la Plaza de la Virgen, puedes iniciar el paseo por la muralla abaluartada. Un camino con vistas espectaculares de la ciudad, en el que iréis encontrando sitios interesantes a visitar en profundidad, como el Museo de Navarra, el emblemático Mercado de Santo Domingo o el Portal de Francia que conserva la antigua estructura del puente levadizo. Una gran oportunidad de recrearse en la era medieval.
Disfrutando de un taller musical infantil en la Muralla
Otro punto interesante en el Paseo de Ronda es el Mirador de Caballo Blanco, con vistas hacia el río y la zona baja de la muralla, donde en verano se celebran muchos conciertos y actividades para toda la familia.
4. Visitar los jardines de la Taconera
Los Jardines de la Taconera son como para olvidarte de que estás prácticamente en pleno centro de la ciudad. Verde y exuberante, con árboles enormes, mucha hierba en la que echarse a descansar o a disfrutar de un pícnic, espacio para correr hasta no dar más. Y además es un parque muy antiguo, salpicado de monumentos históricos y estatuas.
El parque aprovecha la estructura de un antiguo baluarte militar y tiene en su interior fosos que sirven de refugio para animales silvestres. Seguro que los niños se lo pasarán bien buscando desde las alturas los pavos reales, patos, faisanes, patos, cisnes, así como ciervos, conejos y cabras entre otros animales que lo habitan. Un imprescindible en una visita a Pamplona con niños.
No lejos de ahí está el parque Antoniutti, con una gran pirámide de cuerdas para los amantes de las alturas.
5. Pasear junto al río Arga
Hay un hermoso paseo fluvial que discurre al costado del río Arga, entre árboles y sobre una senda que es aprovechada por los pamplonicas para correr, montar bicicleta y otras actividades deportivas. En algunos puntos del sendero encontrarás pasarelas o puentes que te permiten cruzar el río.
No dejes de aprovechar el paseo para conocer el parque Runa. Cuenta con que esta ruta te puede tomar, tranquilamente, hasta un par de horas, y es bueno que lleves contigo algo para merendar con la chiquillada, porque no encontrarás ninguna zona comercial en esta parte del camino.
Paseo fluvial del río Arga en Pamplona
El camino termina justo en el Baluarte Labrit, otra de las estructuras que conforman la muralla de la ciudad. Muy cerca, también, de la plaza de Toros de Pamplona.
6. Recorrer el casco histórico de Pamplona
Aunque, como a nosotros, no te gusten las actividades taurinas, es inevitable hacer el recorrido de los encierros de San Fermín: es una ruta perfecta para sentir el calor de la ciudad y todo un símbolo por sus calles más emblemáticas. Te recomendamos comenzar, como las fiestas, desde la Cuesta de Santo Domingo, que empinada y estrecha, hace honor a su nombre.
Llegarás a la Plaza del Consistorial donde no puedes dejar de ver el precioso edificio del Ayuntamiento y pasear por el Mercado de Santo Domingo, Calle de Mercaderes, telefónica, y la muy concurrida Calle Estafeta, con la curva mas famosa del recorrido. De ahí en larga recta llegaréis a la Plaza de Toros.
Durante todo el año (excepto en los Sanfermines) se puede disfrutar tranquilamente de la oferta de restauración de todos los niveles y para todos los bolsillos. Tapas, pintxos, montaditos y sigue contando. Justo al final del recorrido es una buen a oportunidad para acercarse a la Plaza del Castillo, donde encontrarás mas oferta para comer y, si la ocasión lo propicia, actividades culturales que aprovechan la amplitud de este lugar.
También es una buena opción hacer un break en la Plaza de San Francisco de Asís. Ahí encontraréis una pequeña zona de juegos infantiles en la que los niños podrán sacudir el cuerpo por un rato.
Y entonces llegará el momento de un café y tal vez una merienda en el Bar El Peregrino, que hace esquina justamente con esta plaza y, a la vez, con la Plaza Consejo. Ambiente cálido y acogedor, alguna butaca de la que no apetece levantarse, pastelería muy rica, cosas para una comida rápida y sabrosa. Muy recomendado.
7. Refugiarse en el parque de la Antigua estación de autobuses
En el corazón de Pamplona verás pocos parques infantiles. Pero sí una antigua estación de autobuses ¡convertida en una enorme zona de juegos techada! Perfecta para descansar de un día de mucho sol o para refugierte del frío o la lluvia por un rato.
Es gratuita, y tiene desde juegos, columpios y otras atracciones para los más pequeños, hasta un rocódromo, futbolines y meses de ping pong para los mayores. El mantenimiento podría ser mejor pero se trata de unas instalaciones muy chulas, de un lugar amplio, y hay bancos de sobras para descansar mientras los pequeños se entretienen. Imperdible en Pamplona con niños.
8. Visitar el Parque Yamaguchi
Parque Yamaguchi. Fuente: Turismo navarra
Ideal para sentiros muy zen. Si tenéis tiempo de conocer Pamplona con niños un poco más, es interesante visitar el Parque Yamaguchi, de estilo japonés.
Su simbolismo alude a la celebración de las cuatro estaciones y traslada al visitante a la Ceremonia del Té. Con una extensión de 85.000 m2 incluye un estanque -muy oriental- con su caseta de madera, flotando sobre las aguas. puentes, cascadas, un chorro de agua espectacular, que llega hasta 20 metros de altura, y desde luego, una vegetación que mezcla las especies autóctonas con las exóticas, donde encontraéis anundante sombra muy de agradecer en verano.
9. Pasear entre las estrellas de su planetario
En el Parque Yamaguchi donde os espera el Planetario de Pamplona. Es un edificio muy original, hecho en ladrillo y con una cúpula de 22 metros, la mayor de Europa.
Destaca el contraste del tono anaranjado del edificio con los colores verdes del paisaje que lo rodea y entre estos y el cielo azul. En el suelo del Planetario se proyecta el sistema solar y sus planetas; y en el techo una vidriera con todos los signos del zodíaco.
Antes de entrar se puede visitar una exposición temporal normalmente sobre alguna temática espacial. Una vez en su interior ya acomodados en las butacas reclinadas de la sala de proyección del planetario se disfruta de un pase con panorámicas de estrellas y explicaciones sobre los misterios del universo. El Planetario es también un activo centro cultural y de divulgación científica con interesantes actividades y proyecciones. Vale la pena consultar su web para ver la programación.
10. Escaparos a Irrisarri Land
Irrisarri Land es un parque de aventuras situado en el Pirineo de Navarra (Igantzi) a 50 minutos en coche de Pamplona que ocupa una inmensa superficie de 75 hectáreas. Lo primero que sorprende al estar allí además de su amplitud es su belleza y el espléndido verdor en el que te sientes inmerso.
El parque incluye diferentes circuitos de arbolismo y tres tirolinas con un total de 2,5 kilómetros, una de ellas de 900 metros absolutamente espectacular sin que por ello podamos decir que es extrema y un puente tibetano de 130 metros.
Además en Irrisarri Land encontramos segway, rutas a caballo, tren turístico, parque de juego con chorros de agua, disc golf (algo así como un híbrido entre el golf y el fressbe!), zona de bosque Laser Tag (como un juego de estrategia en equipo paint ball pero usando láser) y, para los más atrevidos, salto pendular, una variante del puenting. En una finca cercana y con un ticket aparte existe un circuito bike para practicar dirt jump.
Por la otra Irrisarri Land ofrece tres diferentes tipos de alojamientos que son el complemento perfecto a su oferta lúdica. Descubre más a través de este enlace.
¿Y tú? ¿Te animas a visitar Pamplona con niños? ¿O a caso ya la conoces y quieres dejarnos alguna recomendación especial? ¡Nos encantaría leerte!
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Turismo Pamplona
NOTA: Agradecemos a Turismo Navarra las facilidades prestadas para poder elaborar esta información.
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