Top 12 planes Selva Negra con niños (o sin ellos)

Sobre la Selva Negra con niños

Por fin pudimos conocer a la Selva Negra con niños en un mano a mano viajero padre-hijo. Y es que esta región con tanta personalidad perteneciente al estado alemán Baden-Württemberg, de la que habíamos oído tanto, puede ser considerada con justicia como uno de los destinos más familiares de Europa, ideal para los amantes de la naturaleza y las vacaciones activas.

Situado en el sudeste de Alemania, al norte inmediato de los Alpes suizos, fronterizo con la preciosa Alsacia de Francia, la Selva Negra es un basto territorio de media montaña compuesto de densos y exuberantes bosques, pintorescos pueblos y ríos, lagos y cascadas por doquier.

Aislada durante siglos, la madera de sus bosques y la forja del hierro producida por sus molinos fueron la base de su riqueza. Este territorio es algo así como la Alemania profunda, atesorando tradiciones como los relojes cucú y una irresistible arquitectura de cuento de hadas.

En la actualidad la Selva Negra es un destino turístico amigo del planeta donde prolifera la energía solar y el turismo de naturaleza. Una comarca única que ofrece bucúlicos paisajes que pide ser explorado en excursiones a pie y que a su vez cuenta con algunas de las rutas en coche más bellas de Alemania.

Para conocer completamente bien la Selva Negra deberíamos dedicarle una semana completa. A destacar la cercanía a atracciones turísticas de interés de Baviera como el celebérrimo Castillo de Neuschwanstein, la ciudad balneario de Baden-Baden, el museo Mercedes-Benz Museum de Stuttgard, el Europa Park o la mencionada región de Alsacia francesa solo por citar algunas joyas a tiro de piedra.

Una escapada a la Selva Negra con niños es ideal en cualquier época del año. En primavera por su verde esplendor, en verano por su frescor, en otoño por el cromatismo que dibujan sus bosques caducifolios. En invierno, si bien los días son más cortos, puedes gozar del confort de sus atracciones indoor y su estación de esquí.

COSAS QUE HACER EN LA SELVA NEGRA CON NIÑOS

1. Dejarse cautivar por Friburgo de Brisgovia

Es la capital y ciudad más importante de la Selva Negra y de alguna manera su puerta de entrada. Famosa por ser una de las ciudades europeas más verdes y una de las más ciclistas de toda Alemania. Una ciudad universitaria de mediano tamaño, muy animada y alegre especialmente en verano.

A nuestro juicio vale la pena dedicarle una buena jornada a para pasear tanto por sus parques como por las preciosas calles de su centro histórico y empezar así a respirar ese aire de cuento de hadas tan característico de esta región.

No os perdais la preciosa catedral y la plaza del mercado, aprovechad si lo necesitáis ya que la ciudad ofrece una amplia oferta comercial de todo tipo además de unas pastelerías para chuparse los dedos donde probar la famosa tarta de la Selva Negra elaborada con cerezas y licor.

Podéis reservar vuestro free tour por Friburgo a través de este enlace.

2. Bañarse en sus famosos lagos

El que pasa calor en la Selva Negra es porque quiere. La especialidad centroeuropea y alemana de los lagos tiene aquí su versión premium y siendo uno de los principales atractivos de la Selva Negra con niños.

Los dos lagos más grandes de la Selva Negra y famosos en todo el país son el lago Titisee (más coqueto y algo más turístico) y el Schluchsee, más grande y tranquilo. En un invierno normal (algo cada día más difícil de definir) los dos suelen estar congelados y son ideales para patinar.

En verano el agua está bien fresca, pero si la calor aprieta el baño es perfectamente apetecible en las horas centrales del día. Así que, al agua patos!

Además de poder alquilar unos patines y/o una barca de recreo para navegar en ambos lagos se instalan islas artificiales de uso gratuito con escaleras como elementos que invitan al baño, todo un imán especialmente para los niños.

Además, en el lago Schluchsee, os espera el espléndido parque acuático con toboganes Aqua Fun Schluchsee.

En la foto superior, no obstante, ves el pequeño lago de Naturbad St. Märgen (abierto desde 10.00 a las 18.00 cada día) donde pasamos una mañana estupenda por un módico precio. Dos piscinas más de este tipo, públicas y bien cuidadas de la Selva Negra son el Ühlingen-Birkendorf y el Freibad Hornberg.

Mención aparte merece el Badeparadies Schwarzwald del que os hablamos más abajo. Os dejamos con todos ellos señalados en el mapa.

3. Encontrar vuestro mejor alojamiento familiar

Aunque su nombre nos pueda despistar el Urbanshof Ferienwohnungen (Hinterzarten) son unos apartamentos rurales de agro-turismo en una típica casa-granja tradicional de campo de la Selva Negra donde los propietarios todavía trabajan la tierra y tienen animales. Un alojamiento ideal para familias con niños.

El hotel Tannenmühle está situado en un idílico rincón natural a 3 kms de Grafenhausen. Con habitaciones e interiores de cálida madera destaca su mini-granja zoológico interactiva, gran jardín y área de juegos de aventura y un restaurante especializado en pescado con la trucha como gran protagonista.

Campings familiares en la Selva Negra

Para los furgoneteros y camperistas esta región ofrece tanto áreas de autocaravanas como campings. El Camping Bankenhof por ejemplo es una apuesta segura. Situado en un emplazamiento privilegiado junto al lago Titisee. También podéis considerar el Camping Kreuzhof, otra opción eco-friendly y familiar made in Selva Negra situado junto al lago Schluchsee.

La Selva Negra es de alguna manera un paraíso para las familias y son muchos los alojamientos preparados y con ganas de recibirlas. Al mismo tiempo estamos hablando de un destino con alta demanda así que es recomendable reservar con antelación. Puedes comparar entre la abundante oferta con los precios más bajos garantizados a través de este enlace.

4. Visitar una granja museo al aire libre

El Museo de la Selva Negra al aire libre es una de esas atracciones más recomendables en la Selva Negra con niños. Un auténtico viaje en el tiempo hacia las formas de vida tradicionales de la región de cuya vista disfrutamos un montón.

Una experiencia deliciosa donde no faltan playgrounds para jugar y animales de granja a los que saludar que nos invita a participar a través de talleres en un recorrido por como eran las granjas y las formas de trabajar y vivir cotidianamente durante siglos.

El museo cuenta con área de picnic y un estupendo bar-restaurante donde probar la famosa tarta de la Selva Negra. Os recomendamos llegar lo antes posible y comer allí. En verano cierran a las 18.00. Merece al menos 3/4 horas y de esa manera aprovechar con más calma el coste de la visita (11€ adulto, 6€ niños).

Si lo que buscas es visitar pequeñas granjas con animalitos, zonas de juego y restaurante tienes otras dos posibilidades situadas en parajes idílicos como son la granja Unterkrummenhof (frente al lago Schluchsee) y la granja, hotel-restaurante Tannenmühle (en Grafenhausen).

5. Deslizarse por sus toboganes alpinos

Diversión sostenible y emoción bajo control. Lanzarse por un tobogán alpino es otra de las experiencias que no os podéis perder en la Selva Negra con niños. Hay varios parques que lo ofrecen.

Nosotros estuvimos en uno de los más destacados, el Hasenhorn Rodelbahn donde mi peque se lo pasó en grande tanto pilotando solo como en compañía de su intrépido padre. Está permitido a los niños solos a partir de los 8 años y 1,40 m de estatura. Te lo dejo localizado en el mapa.

7. Acercarse a la magia de sus relojes de cucú

Venga, más especialidades de la casa. Es el turno de los relojes de cucú, uno de las aportaciones originarias de esta región, más simpáticas y evocadores al patrimonio sentimental de la humanidad presentes en casas de medio mundo. Los relojes cucú son la bomba. Los hay de todos los tamaños y calidades. En la Selva Negra podréis hacer un máster sobre la materia ya que son los souvenirs estrella del lugar.

Existen varios lugares donde acercarse a ellos. Uno de ellos es el pequeño aunque completo Kloster Museum de St. Märgen.

Sin embargo tal vez el más conocido sea en Triberg, el pequeño y pintoresco pueblo donde se encuentra el reloj de cuco con el mecanismo más grande del mundo que, como veréis, se puede activar a modo de atracción poniendo unas monedas. El sitio es ideal para comprar un reloj cucú original artesanal, los tienes desde algo menos de 100€ hasta más de 3.000€.

Aparte de ese súper reloj cucú gigante, existen numerosas tiendas-museo en la carretera. Muy cerca se encuentra una de las grandes atracciones naturales de la Selva Negra, la cascada de Todtnauer Wasserfall.

8. Explorar sus cascadas

La cascada de Todtnauer Wasserfall es la principal atracción natural de la Selva Negra. Una excursión asequible con niños andarines y espectáculo natural muy impresionante para ver como una sucesión de cascadas y la final donde el agua cae desde 97 metros de altura.

Podréis caminar en paralelo o atravesarla merced a los senderos y puentes que la cruzan de un lado a otro del río. En verano también podréis daros un chapuzón en alguna de sus pozas.

Durante el camino es fácil ver ardillas. No olvidéis ir con buen calzado y bien equipados para la excursión, a ser posible con chubasquero intentando evitar el mediodía, ya que a esas horas la cascada está muy concurrida.

Un truco 👉 verano a partir de las 18.00 no cobran entrada y hay menos gente. Al final del recorrido hay unas tumbonas muy chulas desde donde mirar la cascada.

La Selva Negra es un paraíso de cascadas que son la recompensa perfecta para cualquier excursión. Puedes consultar aquí la lista de cascadas en la Selva Negra.

9. Caminar por sendas legendarias

Hablar de un destino de naturaleza de la talla de la Selva Negra significa que podemos pasarlo a lo grande sin gastar un duro, con excursiones para todas las edades y apetencias.

En la Selva Negra existen un montón de rutas senderistas para recorrer con niños, bien señalizados y con sugestivos nombres como como por ejemplo el camino de los gnomos o el camino de los sentidos, del lince o el sendero LEPO que a menudo pasan por zonas de juego, torres de observación, cascadas o áreas de picnic. Que bien se lo montan estos alemanes a la hora de acercar el goce de la naturaleza a toda la familia, todo un ejemplo a seguir!

Así que te recomiendo no dejarlo para el final e informaros antes de venir de los recorridos en la web de schwarzwaldportal y a la llegada pedid un folleto en alguna de las oficinas de turismo porque este es uno de los grandes reclamos y atractivos en la Selva Negra con niños.

10.  Contemplar la Selva Negra por todo lo alto

Construidas de madera, mampostería o metal, las estilizadas torres de observación. A ellas se puede llegar en coche o a pie siendo otra recompensa perfecta para una excursión. Hay un montón y son la derivación de las torres de vigilancia en puntos de observación culminante de la belleza de los bosques y paisajes circundantes. Consulta todas las que hay en este enlace.

En nuestro mapa te dejamos situadas las cinco más destacadas: Feldberg Tower, Riesenbühl Tower, Hochfirst Tower, Hasenhorn Tower y la muy estilizada y moderna Baumwipfelpfad Schwarzwald (o Treetop Walk Black Forest).

11. Pasarlo bien aunque llueva

Un plan providencial para seguir activos especialmente indicado con tiempo frío o lluvioso. Fundorena, en Feldberg, es el mayor parque indoor ideal en la Selva con niños o adolescentes

El centro con ochos circuitos de cuerdas de dificultad crecientes, trampolines, camas elásticas, originales pistas deportivas (dodgeball), saltos freestyle y pista de hielo sintético. Algunas instalaciones son solo para niños mayores de 9 años.

12. Viajar al trópico sin salir de la Selva Negra

En Selva Negra con niños te puedes bañar todo el año si quieres gracias al gran parque acuático indoor Badeparadies Schwarzwald situado en Titisee-Neustadt con un montón de zonas tematizadas. Galaxy por ejemplo está lleno de toboganes y piscina con olas, Palmenoase es la zona de Spa de relax con aire tropical solo accesible a mayores de 16 años.

También hay una gran piscina donde bañas a 33 grados garantizados en cualquier momento del año disfrutando de las vistas haga sol, nieve o granice. Recomendamos pagar 1,5h de tiempo y en función de como vaya ir ampliando 1€ cada media hora. A partir de las 17.00 está menos concurrido.

BONUS EXTRA

SEGREGAR ADRENALINA EN EUROPA PARK

El Europa Park es uno de los parques temáticos mas grandes de Europa y está considerado como uno de los mejores del mundo. Se encuentra situado en Rust, al sur de Alemania, bien comunicado en el estado de Baden-Wurtenberg muy cerca tanto de la Selva Negra como de la Alsacia francesa.

Abierta en 1975, actualmente el parque ofrece casi 100 atracciones, un total de 16 montañas rusas, realmente espectaculares, destacando la Blue Fire, considerada una de las mejores de Europa.

La mascota del parque es un simpático ratón de color gris llamada Euromaus, aunque hay otros muchos personajes que viven en el parque que harán las delicias de los más pequeños. Recomendable reservar al menos un día entero para visitar el parque con calma, sin prisas, pues debido a su tamaño, en verano es muy probable que necesitemos dos o tres días para disfrutar al 100% de sus instalaciones.

Puedes consultar aquí los cuatro hoteles y el camping de Europa Park.

Datos prácticos la Selva Negra con niños

Aeropuertos y vuelos: Puedes comparar precios de vuelos a la Selva Negra (aeropuertos de Zurich, Basel, Strasburg o Stuttgard) en este enlace.

Coches de alquiler. Una opción súper recomendada que os dará libertad para recorrer esta región. Compara precios en este enlace.

En vuestra ruta por los pueblos más bonitos de la Selva Negra no pueden faltar: Friburgo de Brisgovia, Gengenbach, Schiltach, Calw y Triberg.

Tarjeta de descuento. Si vas a visitar las atracciones que te proponemos más abajo te recomendamos considerar la compra de la tarjeta turística Schwarzwald Card.

Basada en nuestra propia experiencia te ofrecemos unas cuantas recomendaciones completadas con un mapa que encontrarás al final. Ahora sí, nos vamos a la Selva Negra con niños!

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